Entre los expertos en seguridad vial se extiende la campaña: “No lo llames accidente de tráfico, llámalo siniestro vial”. Coincidiendo con esta petición, la revista TEMA’S aborda este debate de forma científica con opiniones desde México, Argentina y España. Una interesante y rigurosa exposición sobre cómo denominar los sucesos del tráfico, dependiendo de la disciplina desde dónde se traten.
El axioma “si pudo evitarse, no fue un accidente” por el que llevan peleando años las víctimas de siniestros viales y que defienden los expertos en criminología vial, se abre camino entre todos los que de una forma u otra trabajan en mejorar la seguridad vial. Algo en apariencia irrelevante para la mayoría de los mortales que asumimos esas muertes como inevitables –de ahí que nos refiramos a “accidentes”–, sin recapacitar que detrás de cada mal llamado “accidente” hay un acto voluntario y, por tanto, un responsable. Entonces qué: ¿siniestro o accidente?
La revista digital de criminología y seguridad TEMA’S lo tiene claro en su número de octubre: “Las cosas por su nombre cuando hablamos de seguridad vial”, abriendo un debate en el que tres especialistas internacionales nos acercan su opinión sobre qué terminología es la correcta en cada caso y momento concreto.
México
“Mientras la ONU siga usando el término “accidentes de tránsito”* sería inútil y perjudicial cambiar el nombre”, don Mario Murrieta Fournier
Desde México, don Mario Murrieta Fournier hace en TEMA’S un brillante repaso al cambio de concienciación vivido a nivel mundial en los últimos veinte años, en los que la importancia de la prevención de lesiones en las carreteras ha pasado a convertirse en un problema de salud pública, con la intervención decisiva de la Organización de Naciones Unidas y la proclamación del periodo 2011-2020 como “El Decenio de Acción para la Seguridad Vial”. “México, al aceptar la vinculación voluntaria, tácita e inmediata a esta resolución, –explica Murrieta– también dejó de efectuar otro tipo de acciones recomendadas por algunos estudiosos y doctrinarios en Accidentología Vial, como es el cambio de nombre a los accidentes de tránsito, esto en virtud de que mientras la Organización de Naciones Unidas, la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud continúen usando el término “Accidentes de tránsito”, sería por demás ocioso, inútil y perjudicial tratar de cambiar el nombre”.
*”Accidente de tránsito” es un término latinoamericano, lo que en España denominamos “accidente de tráfico”.Argentina
“Para la Ciencia Criminalística, “accidente de tránsito” es un término técnico, comprensible, preciso e inconfundible, propio de esta ciencia”, Osvaldo A. Cuello Videla
El licenciado en Criminalística, Osvaldo A. Cuello Videla aborda el debate “¿siniestro o accidente?” desde la perspectiva epistemológica de la terminología científica, obviando el uso común o coloquial de los términos “siniestro” y “accidente” y trasladándolo al ámbito de las ciencias, más concretamente de las Ciencias Forenses. Como muy bien explica Cuello Videla, dentro de la Criminalística, existe una rama que se denomina Accidentología Vial, que se encarga del estudio de todo aquello vinculado a los momentos inmediatos, mediatos y posteriores al accidente de tráfico. “El objeto de su estudio es el accidente de tránsito –enfatiza el prestigioso criminalista argentino–. Hay que aceptar que el término técnico “accidente de tránsito” es propio de la Criminalística”. Es decir, un término criminalístico que puede o no coincidir con otras ciencias o con el uso común que coloquialmente se da al término “accidente”. Abre así la puerta a que sea una nueva rama de la Criminología –la Criminología Vial– la que adopte el término “siniestro”, dotándolo científicamente de definición y contenido.
España
“En criminología vial hablamos de siniestro vial y no de accidente de circulación o tráfico”, Juan Antonio Carreras Espallardo.
Y es que si de denominar a la cosas por su nombre se trata, el policía, criminólogo y periodista español Juan Antonio Carreras Espallardo lo tiene claro: siniestro vial, no accidente de tráfico. Carreras Espallardo parte en su exposición de la definición del concepto de “accidente de circulación” como aquel “suceso eventual que altera el orden regular de las cosas” para matizar que, si debe de ser tratado como tal, ha de ser fortuito, inevitable, impredecible y dependiente de la suerte. “Si tenemos en cuenta los tiempos actuales, los avances del tráfico y sobre todo de sus normas, principalmente las penales, con la tipificación de los delitos contra la seguridad vial, el término accidente va dejando de ser correcto para referirse a estos hechos –explica el criminólogo–, ya que estamos diciendo que es algo que tiene que ver con el azar o la casualidad y como sabemos tiene poco de fortuito y eventual, sino más bien de evitable y negligente”. De ahí que en criminología vial se hable de siniestro vial y no de accidente de tráfico, nomenclatura totalmente compartida por los colectivos de víctimas del tráfico y los expertos en educación vial.
El debate no ha hecho más que comenzar
Y no afecta solo a dos disciplinas científicas –la criminalística y la criminología– y al desarrollo y consolidación de la especialidad de criminología vial, por otra parte, más cercana y consecuente con la realidad de las víctimas. Es un debate social en el que en España están tomando parte formadores viales, agentes locales y de tráfico, abogados, fiscales y jueces, medios de comunicación y, al final, todos los que circulamos por las vías. Cuesta desayunar cada lunes leyendo en los periódicos “X muertos en accidentes de tráfico el fin de semana” y que ya no nos altere si la X son 4 o 14, porque tengamos asumido como riesgo para nuestra vida el participar de la circulación. No tendría que ser así al menos. A veces para empezar a cambiar el mundo, basta con empezar a cambiar el lenguaje. ¿Tú que opinas?
NOTA:
TEMA’S es una revista digital de criminología y seguridad, una publicación gratuita de Watson Consultores, dirigida por el licenciado Osvaldo A. Cuello Videla, una obra de referencia científica en más de 25 países de habla castellana elaborada por un comité editorial y científico en el que participan expertos de varias nacionalidades.
Para descargar el número 25 de la revista TEMA’S y leer el interesante artículo de debate “¿Siniestro o accidente?”, pincha aquí.