El club de automovilistas RACE organizó el debate electoral, al que asistieron representantes de PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos. Los cuatro partidos debatieron sobre infraestructuras, parque móvil, formación, sanciones y seguridad vial.
Para la realización de este debate, previamente, el Observatorio Español de Conductores DUCIT había encargado un informe a un instituto independiente que preguntó a más de 2.300 conductores sobre qué aspectos de la seguridad vial y el tráfico debería actual el nuevo gobierno de forma inmediata y urgente. El 24,5% consideró el arreglo de las carreteras como prioritario, frente al 6,9% que apostaba por la educación vial, en segunda posición.
El debate arrancó con unas palabras del presidente del RACE, Carmelo Sanz de Barros, en las que pidió a los políticos presentes un compromiso de impulsar medidas encaminadas a seguir reduciendo el número de muertos en nuestras carreteras. Posteriormente, tomaron la palabra los cuatro partidos políticos, representados de esta manera: Luis Aznar (PP), Zaida Cantera (PSOE), Jacinto Morano (Unidos Podemos) e Irene Rivera (Ciudadanos).
En el primer bloque, infraestructuras, todos se mostraron partidarios de invertir más, pero sobre todo mejor. Para Unidos Podemos y PSOE no se deben acometer nuevas obras, sino mejorar el mantenimiento de las ya existentes. Ciudadanos apuesta por arreglar de forma prioritaria las carreteras convencionales y PP propuso un acuerdo entre administraciones para reducir el riesgo en estas vías secundarias.
El segundo bloque, referido a normativa y sanciones, dejó patente las diferencias entre las distintas fuerzas políticas. Mientras PP se mantuvo a favor de subir la velocidad a los 130 km/h, el PSOE apostó por estudiar más a fondo la subida de velocidad en las carreteras. Ciudadanos comentó la necesidad de revisar la correcta señalización frente a la sanción y Unidos Podemos propuso adaptar las sanciones a la situación económica de cada conductor.
Sobre el parque móvil, cada vez más envejecido, Unidos Podemos propuso la renovación del parque hacia vehículos más ecológicos y eficientes, mientras que Ciudadanos abogó por extender el Plan PIVE a coches de segunda mano con hasta 3 años de antigüedad.
En el bloque de formación, para el PP es importante que las empresas incluyan planes de seguridad y movilidad. El PSOE es partidario de trabajar los reconocimientos médicos y desarrollar un grado técnico en seguridad vial que capacite a los profesionales. Para Unidos Podemos la clave pasa por incluir la seguridad vial en el modelo educativo y Ciudadanos centró el tema de la formación en la concienciación del peligro de utilizar el móvil al volante.
Como cierre del debate, todos los partidos políticos se comprometieron a impulsar una iniciativa parlamentaria en la que se expliquen los criterios por los que se decide la ubicación de radares, en un intento de demostrar que no tienen fin recaudatorio.
Fuente de la información: RACE.